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En el futuro deciden rodar un especial de Friends reuniendo de nuevo, por primera vez desde que acabó la serie, a los 6 actores principales.

Bueno, la cosa es que han pasado muchos años y están todos muy mal, muy viejos, muy calvos y muy gordos, con achaques. No sé, se sabe, por ejemplo, que el actor que hace de Joey está en la fase terminal de un cáncer de vejiga, que la otra, Rachel, lleva varios “bypass”…

Pero a los productores les parece buena idea jugar a que el tiempo no ha pasado, y así, en ese especial, representa que todo ocurre el día después del último capítulo, y bueno, joder, todo resulta muy grotesco, muy decadente. Esa actitud de “somos jóvenes” en gente que, en fin, que se nota que les cruje la espalda cuando se intenta sentar en el sofá aquel, gente que tiene de alguna manera la muerte escrita en las arrugas de la cara…

Todo en ese capítulo, cada chiste, cada risa enlatada, cada situación, APESTA A VIEJO Y A MUERTE.

La canción de la serie "I'll be there for you" suena a despedida de funeral, a mensaje póstumo: "estaré allí, esperándote, en el cielo","cuando mueras estaré allí"

La pesadilla es que es un éxito de audiencia, y, al acabar el capítulo, la realidad de que todo ese tema de "¡Uei! ¡Amigos! ¡Eh!", todo ese "Wow! Chandler y Monica están juntos, yuuu, ja ja", la conciencia repentina de que toda esa mierda acaba en la muerte, cae como un puto puñetazo de silencio aplastando el aire de todas las casas y pisos de las familias americanas. Las chimeneas se apagan y nadie reaviva el fuego de los hogares.

Una tristeza colectiva que acaba con la economía y hunde al mundo en la miseria. Y ese podría ser el fin de la raza de lo hombres quizás: Friends. Old Friends se llamó el capítulo, la gracieta.