Hoy me he tomado en serio lo de "colgar en la red":
humor del bueno.
¡Eh! ¡Va! En serio, no. La verdadera razón por la que os he dejado aquí colgando estas pelotitas es porque ellas me susurraron la posibilidad de albergar más de dos testículos en el mismo saco escrotal.
Éstas pelotitas me lo dijeron muy bajito al oído, y en fin, por lo visto, el personaje que sufriría esta alteración lo llevaría bien, con orgullo, enseñaría sus pelotas a las primeras de cambio, siempre se lo haría para sacar el tema y luego siempre se lo montaría para sacar los cojones: primero saca el tema, primero lo conceptual, lo abstracto, y luego ya se desabrocha los pantalones y se saca los testículos, un sacar más tangible.
Pero bueno, esto de tener más de dos testículos es una cosa que seguro que ya existe, es una alteración que tampoco debe ser tan exótica.
¿Y tener dos sacos escrotales? ¿Uno con dos testículos y el otro sólo con uno? Eso ya no sé si lo encontraríamos ni en Google.
Hoy ha salido así esto. Pero volved mañana ¿eh? Mañana quizás me sale mejor. Va, por favor.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Los testículos son verdaderamente fascinantes. Desde los cojos a los triples. Ea
ResponderEliminarA juzgar por la foto, la abuela bloguera vive en una especie de psiquiátrico. Además, sea el juego que sea el de las bolas rojas, no es jugable si la mesa está en una esquina, un BILLAR ENCAJADO EN UNA ESQUINA, eso sólo lo verás en una loquería.
ResponderEliminarel famoso Jordi 3 huevos
ResponderEliminarbuf
ResponderEliminarpodria no ser un juego Miguel, podría ser un almacén de bolas rojas. no NO?¿
En esos términos el descargar de la red tiene un significado bastante doloroso (una sofisticada estrategia para evitar la piratería?)
ResponderEliminar