8/04/2010

El secreto que mejor guardado tiene los curas, lo que llevo sospechando desde hace tiempo.

En las bodas, tras la ceremonia, cuando ya todo el mundo está fuera de la iglesia esperando, los novios tardan mucho rato en salir, y lo que ocurre ahí dentro es que los recién casados están echando un polvo, el de inauguración, dentro de la iglesia, sobre el altar, bajo la supervisión del sacerdote, que lo bendice.

Luego ya salen y viene todo lo del arroz y toda la mandanga.

2 comentarios:

  1. No quiero ni imaginar lo que esparce el sacerdote para bendecir en lugar de agua bautismal.

    ResponderEliminar
  2. No es un polvo, Abuela. Es un cunnilingus practicado entre el novio y el cura.

    ResponderEliminar